Fluorita para el MUNDO

por | Ago 24, 2011 | 0 Comentarios

J. Carlos Gutiérrez/ Pulso
El solitario gambusino que picó por primera vez la superficie del cerro, hace unos 100 años, nunca imaginó que estaba parado sobre el yacimiento de fluorita más abundante del mundo, concesionado actualmente a un consorcio que obtiene 543 millones de
 Sobre la cima de un cerro en la comunidad La Salitrera, Villa de Zaragoza, se encuentra “Las Cuevas”, una mina subterránea de fluorita cuya eficiente explotación le permitió a Mexichem ingresar al nivel de las mineras mundiales.

Sin la visión de ese solitario minero, que apostó su suerte sobre el accidentado cerro tapizado de encinos y magueyes, Mexichem no podría cotizar en la Bolsa de Valores, ponerse al tú por tú con China, otro gigante en la explotación de la roca cristalina, y darle a la comunidad empleo y algo de dignidad.

“El éxito de una empresa radica en no endeudarse más de lo que uno vale”, comenta Rafael Dávalos, director general, en la sala de juntas de una de las sedes de Mexichem, en la Zona Industrial de San Luis Potosí. Las cifras que brinda son las que impresionan en esa habitación flanqueada de ejecutivos. La historia de la empresa en los últimos 40 años ha sido discreta pero tenaz, y efectiva, hasta llegar al punto en que, en 2003 sus ventas alcanzaron los 260 millones de dólares, y en 2011 se internacionalizó, alcanzando los 3 mil 600 millones de dólares en ventas.

La explotación de fluorita para su exportación fue el cimiento de Mexichem, pero en las siguientes décadas, sus operaciones se extendieron a dos cadenas productivas relacionadas con la industria química y, con préstamos modestos –deuda mínima le llamó Dávalos- y adquisiciones efectivas, la empresa lograría las cifras antes dichas.

“En 2003 teníamos menos de 2 mil empleos, hoy contamos con 11 mil; nuestra posición en la Bolsa Mexicana de Valores era el septuagésimo quinto lugar, hoy ocupamos el noveno; operábamos en dos países y hoy tenemos presencia en 18…sí, Mexichem es una compañía que dará de qué hablar en los próximos años”, expresa el CEO de unos 50 años, moreno, pelo cano.

¿Les preocupa la crisis en Estados Unidos y su efecto en los mercados internacionales? Le preguntan. “Humm..no. Deberíamos, pero no lo estamos, en 2008 pasó algo similar y salimos adelante no endeudándonos y trabajando”, respondió Dávalos, añadiendo que el objetivo ahora es lograr un contrato con Petróleos Mexicanos para fortalecer sus divisiones de petroquímica.

OSCURO PROFUNDO

Rumbo a la comunidad La Salitrera, en el camino bien cuidado y en la inusual limpieza de las callejuelas del pueblo puede verse la influencia de la empresa en la comunidad.

Al llegar al campamento, situado en lo accidentado de los cerros, destacan las naves techadas con lámina de la planta de beneficio, y la boca de la antigua mina “Las Cuevas”, que guarda enormes bancos del preciado mineral en sus entrañas. Frente al complejo minero, en lo alto de otro cerro están las casas para los ejecutivos y una villa para los trabajadores sindicalizados.

“Esta mina es de primer mundo aunque estamos en un país subdesarrollado, con un equipo mínimo de trabajadores se producen 5 mil 500 toneladas diarias de mineral”, explica Héctor Vázquez, gerente de producción. Tres grupos de 28 personas trabajan las 24 horas del día en el proceso de extracción, pero a nivel general, la planta en San Luis ocupa a mil trabajadores.

Las camionetas se internan en la mina, no sin antes dotar a los pasajeros del equipo de seguridad necesario. En zig-zag, los vehículos descienden a 260 metros de profundidad –equivalente a cinco veces la altura del edificio Puga- por un túnel de un sólo carril, pero lo suficiente mente ancho, hasta llegar a la zona de trabajos.

CRISTALES Y CALCIO

Poco es sabido que de esta profundidad surge una de las materias primas para elaborar el acero, la pasta de dientes; las latas de gas refrigerante que se inyectan al sistema de aire acondicionado de los autos; la cerámica de los platos y teteras de nuestra cocina, incluso el papel aluminio con el que envolvemos los alimentos, así como el ácido fluorhídrico, utilizado para fabricar y limpiar componentes electrónicos.

Por esta razón, porque el fluoruro de calcio está presente en nuestras vidas, la mina “Las Cuevas” es explotada las 24 horas del día. La empresa no repara en gastos para impedir obstáculos en la extracción de este mineral.

Tan sólo en un equipo de seguridad para cada minero, la empresa debe gastar 19 mil pesos (localizadores personales con sistema de posicionamiento global: 4 mil pesos; una mascarilla de auto rescate que impide el paso de dióxido de carbono al respirar: 5 mil pesos; cascos, guantes botas y lámparas especiales: 4 mil pesos, entre otros aditamentos) y en maquinaria pesada importada desde Suecia, como la taladradora Jumbo, un vehículo de grandes proporciones que vale un millón de dólares.

Jumbo tiene la forma de una retroexcavadora. Se mueve con gasolina, pero taladra con energía eléctrica para evitar la acumulación de dióxido de carbono en el interior de la Tierra. Taladra a nueve metros de profundidad a los lados y arriba del túnel previamente excavado, otra cuadrilla coloca explosivos en el fondo de cada orificio y suben a la superficie para detonarlos de manera segura.

El material resultante, compuesto de piedra caliza, fluorita y sedimentos es sacado a la superficie a través de camiones de 14 toneladas, y depositado en una zona de trituración para uniformar el tamaño del mineral. Posteriormente, es llevado a la planta de beneficio, donde a través de potentes chorros de agua pulverizan la fluorita y la separan de otros compuestos usando ácidos especiales.

El producto final, ya seco, es una especie de talco blancuzco. Parte de su producción se exporta al Reino Unido, Estados Unidos, Brasil y algunos países de Asia, pero otras se destinan a la planta Mexichem en Matamoros para convertir el polvo en concentrados ácidos, unos 270 millones de libras anuales.

“A través de diversos y complejos procesos, la fluorita también se puede convertir en un plástico resistente, estamos invirtiendo en investigación para fabricar chalecos anti balas y competir en ese mercado”, comentó Héctor Valle Martín, director de la cadena Flúor, en Mexichem.

GRAN EMPORIO

Los pasajeros se tapan los ojos con el antebrazo cuando los vehículos en los que viajan vuelven a la luz, que en la última rampa parece una lámpara más de las que alumbran el interior de la mina, y que al aproximarse va adquiriendo su real dimensión.

Héctor Vázquez, el gerente de producción culmina su participación en el recorrido patentando su orgullo por ser minero. “Vengo de una familia de mineros, mi padre y mi abuelo lo fueron, y trabajar en una mina como ésta es un orgullo, hay seguridad y compromiso entre trabajadores y patrones, y las diferencias siempre son disipadas en el diálogo”.

En el regreso a la ciudad, los ejecutivos de Mexichem brindan un panorama del tamaño de su empresa. Afirman ser el productor mundial más grande de ácido fluorhídrico y el único productor integrado de fluorocarbonos en América; tener el liderazgo en Perú en el negocio de tubos y conexiones y líder en resinas y tuberías de PVC en México.

“Y en materia de sustentabilidad con el medio ambiente, en 2010 invertimos 18.4 millones de dólares en proyectos de protección, pero también en la mejora de nuestros procesos, ahorrando energía y devolviéndole a las comunidades donde operamos obras sociales”, dijo Francisco Díaz Hipólito, gerente corporativo de Medio Ambiente.

http://www.pulsoslp.com.mx/Noticias.aspx?Nota=42240

Comparte:

Más noticias

A casi 6 años del primer derrame de la Minera Cuzcatlán, la empresa continúa contaminando.

A casi 6 años del primer derrame de la Minera Cuzcatlán, la empresa continúa contaminando.

Habitantes de Magdalena Ocotlán denuncian escurrimientos de la montaña “Dry Stack” (presa de jales) de la minera Cuzcatlán y contaminación del río Coyote.   En la mañana del martes veintitrés de septiembre habitantes denunciaron a través de redes sociales un...