Tuxtla Gutiérrez
HOY, alrededor de 1 millón 200 mil hectáreas de la Sierra y Centro de Chiapas son explotadas por empresas canadienses.
Explotan yacimientos de oro, plata, magnetita y titanio; organizan II Encuentro de Afectados por Actividad Minera en Acteal
El Heraldo de Chiapas
22 de marzo de 2012
MARIANA MORALES
San Cristóbal de Las Casas.- Desde el 2004 a la fecha, en Chiapas se siguen otorgando concesiones a mineras extranjeras, sobre todo a canadienses, las cuales explotan yacimientos de oro, plata, magnetita y titanio en por lo menos 50 municipios del Norte y Sierra del estado, dijo Gustavo Castro, coordinador de la asociación civil «Otros Mundos».
En una entrevista, enfatizó que con los permisos otorgados por la Secretaría de Economía, las empresas tienen en su poder 120 derechos de explotación por un periodo de 50 años.
Además, la autoridad ambiental de Chiapas sigue concediendo permisos a empresas privadas para extraer arena, grava o piedra del suelo de las zonas del Centro y Costa de la entidad. El año pasado, la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn) autorizó cuatro permisos para ese saqueo.
Por ello, comentó que pobladores afectados por dichas empresas, quienes aseguran mantienen problemas de salud a causa de la extracción, se organizan para efectuar el II Encuentro de Afectados por Actividad Minera, a celebrarse en agosto en Acteal, en la zona indígena.
El ambientalista recordó el caso del activista Mariano Abarca, quien fue asesinado tras denunciar las afectaciones de la empresa minera canadiense BlackFire al poblado de Chicomuselo, misma que fue cerrada; por lo que dichas asociaciones solicitan el cierre de las restantes que extraen algún tipo de material en la entidad.
Fue en el 2000 cuando se facilitó la investigación a empresas extranjeras, para analizar los recursos que posee Chiapas y a partir de 2004 se empezaron a otorgar las concesiones de explotación. Hoy, alrededor de 1 millón 200 mil hectáreas de la Sierra y Centro son explotadas por empresas canadienses, según «Otros Mundos».
Una minera a cielo abierto gasta 150 millones de litros de agua por hora, lo que gastaría una familia indígena en 20 años. Las consecuencias: hay impacto ambiental, forestal y vegetal, contaminación y uso excesivo de agua, migración de las familias y afectaciones en la salud de pobladores, el pago a los trabajadores sin respetar la Ley Federal del Trabajo.
http://www.oem.com.mx/elheraldodechiapas/notas/n2475833.htm