- Aseguran que está al servicio de los intereses de la empresa y no de ellos
Más de 500 carboneros están apostados frente al portón, el acceso principal a la unidad VII de MIMOSA; a gritos demandan justicia y que las autoridades aclaren la muerte de sus colegas
A nombre del grupo, José Ignacio Navarro solicitó el apoyo y respaldo de la dirigencia del sindicato minero nacional, de Napoleón Gómez Urrutia, porque no hay quién defienda sus derechos, y pidió la solidaridad de las más de 100 secciones mineras de todo el país.
Más de 500 carboneros están apostados frente al portón, el acceso principal a la unidad VII de MIMOSA; a gritos demandaron justicia y que las autoridades aclaren la muerte de sus seis colegas.
Exigieron también una investigación minuciosa sobre las condiciones en que opera la unidad extractiva y pidieron que la haga personal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) federal y gente del Sindicato Minero Nacional.
Hace cuatro días que está paralizada la unidad extractiva y nadie les aclara nada, los directivos ni siquiera los quieren recibir.
Desesperados ante la incertidumbre de que no se subsanen las irregularidades y falta de medidas de seguridad e higiene en el yacimiento y ante el temor de quedarse desempleados, gritan consignas a los directivos: «Ustedes comen carne y nosotros puros huevos, porque los frijoles están muy caros».
Descalzos
«El viernes, cuando por un derrumbe murieron los seis compañeros, nomás faltó una chispa para que explotara la mina», afirmó vía telefónica el operario minero José Ignacio Navarro, al considerar que la tragedia pudo ser mayor.
«Dicen que esta es una mina muy segura, pero son puras mentiras, siempre estamos en peligro por el gas metano, porque sólo se polvea una parte (con polvo inerte) y lo demás no», sostuvo.
«Lo único que les importa es sacar la mayor cantidad de carbón y presumir los records de producción y nosotros siempre jodidos», apuntó Navarro.
Reveló que hay carboneros que andan descalzos porque no sacan ni siquiera para comprar zapatos, aunque trabajan jornadas de 10 horas diarias, seis días a la semana, con una paga de 96 pesos diarios.
Cada agremiado paga al sindicato de 100 a 150 pesos de cuotas sindicales por semana y señalaron que no los apoyan “en nada” y únicamente les cobran.
«Es un sindicato blanco que está a lo que diga la empresa, les sirve a ellos no a nosotros, hasta nos robaron el fondo de prohuelga que eran dos millones 860 mil pesos», declaró.
«Aquí no hay seguridad, la mina está llena de gas, yo me quedé enterrado el 26 de marzo del año pasado cuando fallecieron dos compañeros por una explosión de una bolsa de gas metano», indicó.
Conforme transcurre el tiempo va en aumento el contingente y las consignas, a cada momento se suman más compañeros al plantón, de 400 que eran esta mañana, ya son más de 500 de los turnos de tercera y primera. La plantilla laboral es de mil 100 obreros, en los tres turnos, aproximadamente.
Dijeron que esperan la llegada de los obreros que van «de tercera», a las 3 de la tarde, para presionar a los directivos de la empresa Mimosa (que recién cambió su razón social a Minera del Norte S.A. (Minosa) para presionar y que, previas medidas de seguridad, se reanuden las labores para volver a trabajar.
CRÉDITOS:
El Universal / EGMO Hoy 14:11 hrs