
Mulegé, Baja California Sur.- Los proyectos mineros Los Cardones, San Antonio y El Boleo en Baja California Sur (BCS) no plantean la generación de beneficios económicos, sociales ni ambientales por el contexto en el que opera según un estudio del Centro para la Responsabilidad Social en la Minería (CSRM) de la Universidad de Queensland, Australia.
El informe del CSRM, que se presenta este viernes en La Paz, advierte que existe actualmente una importante actividad exploratoria minera en Baja California Sur (BCS), y que si sigue creciendo y se inicia la explotación de los recursos minerales podría convertir y transformar al estado en una visión contraria al enfoque ecológico y turístico de la zona.
Cecilia Reátegui Olguín, investigadora y analista del CRSM dijo que «El impacto de los proyectos debe entenderse en un amplio sentido, considerando aspectos económicos, pero también aspectos sociales, culturales y relacionados con los modos de vida de estos centros poblados, incluyendo impactos a sus vías de transporte y fabrica social.Prueba de ello es que no se señala el tipo de empleo, los requisitos de estos. No existe certeza de que estos empleos puedan ser contrataciones locales.Los textos señalan que se generarán ‘derrames económicos’, pero no se describen a que se refieren específicamente estos efectos económicos, y tampoco existe claridad de cuantos de los gastos asociados pudieran materializarse en el estado de BCS».
También se afirma que en las 3 manifestaciones de impacto ambiental que los proyectos se emplazan en una zona de ‘vocación minera’. No es posible atribuir a las zonas del proyecto una supuesta ‘vocación’ minera, dado que la minería que se realizó en el pasado (hasta fines de los años 50 en el distrito minero el Triunfo, San Antonio y Santa Rosalía) fue completamente distinta en términos de volumen de operación y tecnología a la minería que se propone (galerías vs. cielo abierto en el caso de Los Cardones y San Antonio). Estas declaraciones en los documentos aparecen como una aseveración que busca engañar a los lectores y es una clara muestra de la desconexión entre las realidades locales y las propuestas de los proyectos mineros.
Según la experta, los nuevos proyectos mineros de BCS requerirán procesos de extracción y metalúrgicos completamente distintos para la obtención del producto deseado en comparación con la actual minería de BCS. Si es que los proyectos propuestos se materializan podría dejar un precedente para otros proyectos en etapa de exploración, lo cual podría convertir a BCS fácilmente en un estado minero.
La mayoría de la población en Baja California Sur (72.4 por ciento) trabaja en el sector terciario, es decir comercio, transporte, sector inmobiliario, turismo y hotelería, y los servicios, el cual incluye labores relacionadas al turismo. Esto indica que el sector terciario es el mayor generador de empleos y por lo tanto se convierte en el sector al cual el gobierno tiene que proteger de potenciales impactos de los proyectos mineros, el cual tiene un aporte económico bajo en Baja California Sur.
«Si comparamos a BCS con estados mineros como Chihuahua, Coahuila, Durango, San Luis de Potosí, Sonora, Zacatecas vemos que no se ha necesitado de la industria minera para tener una mayor esperanza de vida, menor tasa de pobreza, un índice alto de educación y mayor índice de desarrollo humano, lo cual indica que la minería no ha contribuido al desarrollo de dichas regiones.» dijo Reátegui Olguín.
El gran beneficio de la minería en una región se da cuando el proyecto minero invierte en compras locales lo cual genera encadenamiento con los demás sectores productivos. Sin embrago, ya que BCS no es una región minera y la mayoría de la sociedad tampoco quiere que lo sea, no tiene muchas compañías competitivas que puedan proveer servicios técnicos a los proyectos mineros metálicos. Por ellopara que el estado se pueda beneficiar completamente de un boom minero metálico tendría que convertirse en una región minera, enfocada y dando servicios a la industria extractiva, y esto va contra la visión a futuro. Aún más cuando se señala solo que 400 empleos indirectos en etapa de operación serán relacionados al municipio de La Paz sin una certeza de que estos empleos puedan ser contrataciones locales.
«El sur de BCS tiene vocación turística y no minera. La diferencia entre los proyectos mineros y un hotel, es que este último proyecta una vida más larga que Los Cardones, y esto hace que los dueños en la industria hotelera re-inviertan este 50% en proyectos futuros en el estado o en el mismo hotel. En el caso de los proyectos mineros se plantea una vida de pocos años lo que genera que, una vez acabado el proyecto se lleven consigo la totalidad de las utilidades recaudadas fuera de la región, además de dejar fuertes pasivos ambientales» continuó.
«Bajo el criterio Centro para la Responsabilidad Social en la Minería de la Universidad de Queensland, Australia, los proyectos mineros no presentan información responsable, ya que este no traerá mayores beneficios desde una perspectiva social, económica y ambiental», finalizó Reátegui Olguín.
http://www.oem.com.mx/elsudcaliforniano/notas/n3354559.htm