Un organización civil de la zona minera de Coahuila, señala que esperan que el gobierno federal imponga una sanción ejemplar al consorcio que ocasionó la contaminación de los ríos Sonora y Bacanuchi
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La historia de este grupo industrial con relación a los accidentes que ha tenido en diversas zonas del país, se remonta a muchos años atrás, la organización en defensa de los mineros en Coahuila, elaboró un documento denominado Una historia de muerte y desolación: la minería de Asacro-Grupo México, en el que detalló el camino de muerte y depredación ambiental que ha provocado la empresa en la Entidad.
En Coahuila, la historia de accidentes de Grupo México en la región carbonífera se remonta a 1908, cuando en la mina 3 Rosita, perecieron 200 mineros por una explosión de gas, pero eso, sólo fue el comienzo, la empresa ha dejado una estela de abandono de hornos de Cloete utilizados para coquizar el carbón.
En el municipio de Sabinas, se aprecia un severo deterioro ecológico ocasionado por las minas del Mezquite, propiedad del mismo grupo, en este lugar, una explosión en 1976 dejó siete trabajadores muertos.
En 1980 otros cuatro mineros fallecieron al estallarles un transformador. Y en la misma mina, en 1998, fallecieron tres más, dos de ellos de 17 y 14 años.
En la zona de las minas Rosita, también se han registrado diversos accidentes en 1921, seis mineros murieron por explosión de gas, 57 en 1934 por explosión de gas y polvo de carbón, 36 en 1938, siete en 1939, cuatro en 1942 y uno en 1948, todos por la misma causa. Además, 11 decesos por una máquina eléctrica que reventó y explotó. El 10 de septiembre de 1976 hubo otra explosión y perdieron la vida otros dos trabajadores.
Pero no nada más en la zona de minas es donde la contaminación y el daño de Grupo Minero México han dejado huella, en la colonia Rovirosa en Nueva Rosita, a un costado de las viviendas, es el sitio en donde el grupo industrial tira sus desechos, a tan sólo 50 metros de las viviendas.
Por ello, y ante tantos desastres y pérdidas de vidas humanas la organización que encabeza Auerbach Benavides exige la disolución de ese grupo: Es una empresa depredadora que debe desaparecer.
Señalan que Grupo México no va a cambiar, pues los mineros siguen muriendo por las mismas razones desde 1908 y los desastres ecológicos son los mismos. Es la repetición del delito, porque nunca lo han sancionado realmente, más que con multas ridículas. Cuando un Estado no castiga, bendice.
Las multas que el Estado mexicano ha impuesto a Grupo México, por ocasionar desastres ecológicos o no cumplir las normas de seguridad en sus minas, a lo largo de la historia; van de los 8 mil a los 180 mil pesos.
La organización civil, consideró que si en esta ocasión se aplica un castigo, ejemplar a la minera, podría esperarse que las industrias que lleguen a México tras la apertura de Pemex, tengan mayor cuidado en sus actividades.
“Si se castiga a Grupo México, Pemex y las otras empresas causantes de desastres ecológicos, los inversionistas depredadores que están anotados la van a pensar; pero si no, lo que nos espera es peor” señala Auerbach Benavides.
