Todos Santos, Baja California Sur (BCS). Más de 60 organizaciones y alrededor de 2,500 ciudadanos, acudieron al llamado que emitió el Frente Ciudadano a Favor del Agua y la Vida, para firmar el Pacto de Todos Santos.
En un hecho histórico, políticos, activistas sociales, amas de casa, deportistas, periodistas, académicos, entre otros, signaron un documento con el que rechazaron la instalación de proyectos mineros a cielo abierto en Baja California Sur.
Consistente en ocho puntos, los firmantes se declararon opositores proponiendo la desobediencia y resistencia civil pacífica, “a la instalación de megaproyectos mineros en esta región”.
Consideran la autorización de la minera de Ricardo Salinas Pliego, por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) como “una sentencia de muerte”.
“Exigimos a todos nuestros representantes populares, locales y federales que se manifiesten públicamente en contra de la mega minería tóxica y lleven a cabo las diligencias necesarias para la cancelación de los permisos y concesiones en nuestros municipios”, exclamaron.
Aprovechando que los comicios se encuentran próximos, en 2015, la ciudadanía también pidió a quienes aspiren a un puesto de elección popular, fijar postura ante la actividad extractiva de manera oficial.
Todo aquel que llegué al sur de BCS y se pronuncié a favor de la minería tóxica, en conciso en La Paz y Los Cabos, será declarada persona “non grata”, “y será repudiada”.
Reconocieron que la lucha no es local, por ese motivo, se pronunciaron a favor de apoyar causas a nivel nacional, en las que se vislumbre el abuso de los grandes capitales en regiones prioritarias de conservación del patrimonio social, cultural y natural de México.
A los gobiernos municipales, a la administración estatal y al Congreso de Baja California Sur, los exhortaron a crear mecanismos legales para “liberar a sus ciudadanos de la amenaza que significan estos proyectos”.
Ricardo Barroso Agramont, Isaías González Cuevas y Esthela Ponce Beltrán no estuvieron presentes. Rosa Delia Cota Montaño, presidente del PRD y el líder de Movimiento Ciudadano, Erasmo Castañeda, fueron algunos de los políticos que firmaron el pacto.
La Red 7 de Febrero con Víctor Castro Cosío también participaron en el importante suceso, además del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el Partido de Renovación Sudcaliforniano.