La avidez de la industria extractiva por los bienes minerales de Baja California Sur es un pozo sin fondo. En noviembre pasado, la Red Mexicana de Afectados por la Mineria (REMA) pedimos a las autoridades no otorgar más concesiones de exploración a Mexicana del Arco S.A. de C.V., filial del Grupo México, cuyo proyecto minero “El Arco” amenaza las áreas naturales protegidas del Valle de los Cirios y de El Vizcaíno.
Hoy nos preocupa el altamente peligroso proyecto de extracción submarina de arenas fosfáticas llamado “Don Diego”, promovido por el consorcio minero Exploraciones Oceánicas S. de R.L. de C.V., filial de la empresa estadounidense Odyssey Marine Explorations. Abarca una superficie de 91,267 hectáreas en la Bahía de Ulloa, en la Zona Económica Exclusiva de México, a unos 22 metros de la costa. Consiste en dragar el fondo marino a una profundidad de 60 a 90 metros para extraer 7 millones de toneladas de arena fosfática cada año, durante 50 años, con el objetivo de producir 3.5 millones de toneladas de fósforo anualmente, según la manifestación de impacto ambiental emitida por la empresa. El producto final sería destinado a la fabricación de agroquímicos, contribuyendo a contaminar aún más el planeta.…